Ya hemos hablado, en varias entradas, sobre diferentes aspectos de la alimentación complementaria (AC). Actualmente, tenemos mucha información y numerosas recetas en internet y redes sociales, que nos hace volvernos un poco locos. Vamos a hacer un repaso general, derribando algunos de los mitos, para estar realmente actualizados en AC.

 

MITO 1. Se puede empezar a dar cereales sin gluten a los 4 meses.

Ningún bebé sea alimentado con leche materna o formulada adaptada, necesita iniciar la AC, antes de rondar los 6 meses.

Además, no es necesario introducir antes los cereales sin gluten, se pueden introducir indistintamente, una vez iniciamos la AC. Me gusta también recordar, que se puede prescindir de los cereales de caja, hay harinas de multitud de cereales disponible en los supermercados, si queremos hacer papillas, y diversas maneras de dar los cereales sin papilla (arroz, pasta, pan, quinoa…)

 

MITO 2. Debemos retrasar la introducción de los alimentos más alergénicos.

Esto no tiene nada de cierto, retrasar los alimentos que más frecuentemente producen alergia en los niños, no hará que prevengamos esa alergia, podría ser hasta al contrario. Así que debemos introducirlo en el orden que queramos, sin retrasarlo, lo que sí debemos hacer el introducirlo durante 3 días (no hace falta que sean consecutivos) sin presentar otro alimento nuevo, para que nos sea posible detectar una alergia, si se diese el caso.

Aquí tengo que puntualizar, que ni siquiera es necesario retrasar la introducción del huevo, ¡qué menuda controversia hay con el huevo!

 

MITO 3. Hay más riesgo de atragantamiento dando trocitos (BLW) que triturados.

Esta creencia está extendida, pero no es así. Si tenemos en cuenta que el bebé cumple los requisitos para empezar, aplicamos la seguridad en el proceso y presentamos los alimentos de manera adecuada, el riesgo, está comprobado que es el mismo.

 

MITO 4. La leche ya pasa a ser el postre, que así comen más.

La leche sigue siendo su alimento principal, hasta el año. Por eso mismo llamamos a la alimentación COMPLEMENTARIA. No necesitamos que el bebé coma grandes cantidades de comida, el objetivo, estos primeros meses, es que descubra un mundo nuevo de sabores y texturas y vaya, poco a poco, introduciéndose en la alimentación familiar.

 

MITO 5. ¡Cómo me va a gustar eso! Si no sabe a nada… ponle un poquito de sal, anda.

Los que necesitamos sal o azúcar, y la echamos de menos en determinados alimentos, somos los adultos, no los bebés. Nuestro paladar está acostumbrado a ciertos niveles de sabor, y si no los tenemos, lo echamos de menos (tienes que saber que esto también lo puedes entrenar ahora). Pero los bebés no lo conocen, porque si hay algún rechazo o poco interés en la comida, no va a depender de si esta sosa o no le damos alimentos con azúcar. Ellos desconocen estos sabores, y les vale con experimentar el sabor real de la comida, sin interferencias.

Espero que hayas derribado mitos en torno a la AC, y te queden más claros algunos conceptos. No me despediré, sin daros un consejo… ¡disfrutar! Bajar las expectativas, darle tiempo, dejarle que vaya a su ritmo, y permitirle disfrutar de la comida a vuestro bebé también.

Marta Espartosa

Enfermera pediátrica

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