Dentro de toda historia de lactancia, llega el momento del destete, a veces antes, a veces después, pero sea como sea, te puede generar dudas. El destete, además, conlleva una fuerte implicación emocional en muchos casos, así que precisa igualmente ser respetado y acompañado. Vamos con una de las dudas más frecuentes en el proceso, ¿hasta cuándo tendré leche?

¿Qué hormonas están implicadas en la lactancia?

Como ya hemos hablado en otros post anteriores, las grandes protagonistas en la lactancia son la prolactina y la oxitocina.

Si nos centramos en el destete, cobra más importancia, el Factor Inhibidor de la Lactancia (FIL). Es una proteína presente en la leche materna, si el pecho no se vacía en un tiempo y se “acumula” la leche, el cuerpo reconoce el FIL y frena la producción, ya que se interpreta que el bebé o niño, no necesita tanta cantidad de leche. Si hacemos un destete progresivo, el FIL regulará la producción.

Y entonces, ¿hasta cuándo tendré leche?

Esta pregunta, no tiene una única respuesta. Es otras especies mamíferas, tras unas semanas sin amamantar a la cría, desaparece la producción. Sin ir más lejos, en las vacas, tras 7 días sin amamantar a las crías, desaparece la producción.

En cambio, en la especie humana, hay casos, en los que las mamás, tras meses o incluso años de destete, se manipulan el pecho, y encuentran secreción láctea. Esto es tan normal, como la mamá que no se encuentra nada. Si la secreción es blanquecina, amarilla o incluso transparente, no tienes de que preocuparte.

La oxitocina es la culpable.

Es la gran diferencia, de la especie humana con el resto de especies mamíferas. La oxitocina es conocida también como la hormona del amor y del vínculo. Y una madre puede segregarla, al abrazar, besar, oler o incluso viendo fotos de sus hijos.

Sería esta hormona la culpable, de que algunas madres mantengan una ligera producción, debido a su secreción por el vínculo materno-filial. ¿No es fascinante la naturaleza humana?

¿Cuándo debo preocuparme?

Como hemos dicho, una secreción normal es transparente, blanca o amarillenta. Si encuentras secreción de color oscuro o rojizo, sí que debes consultar. También, si encuentras secreción de cualquier tipo, sin manipular el pecho, debes consultar.

Marta Espartosa

Enfermera pediátrica

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