Parece una pregunta, sin mucho sentido, hasta que te pones a preparar y dar un biberón, ¡cuantas dudas pueden surgirnos! ¿verdad?
Pues para eso estamos aquí, para resolverlas. Las recomendaciones que te daré a continuación nos sirven siempre que demos un biberón, no importa que lo hagamos de manera esporádica (si el bebé continúa con lactancia materna) o si el bebé toma lactancia artificial en cada toma.
¿Qué es el método Kassing?
Es la forma de dar un biberón, lo más parecido posible a una toma de pecho. Se huye de que la leche salga prácticamente sola y le caiga directamente en la boca al bebé, para realizar una toma, lo más fisiológica posible, en la que los músculos del bebé tengan que trabajar, y practique una succión efectiva, la posición sea más similar…
¿Por qué utilizarlo?
Está demostrado que los bebés alimentados con biberón comen más de lo que realmente quieren y/o necesitan. La leche les cae por gravedad sin controlar ellos mismos la cantidad, y también porque puede que insistamos en que tomen un poquito más.
¿Cómo lo hago?
- Coloca al bebé en posición más vertical. Puedes hacerlo o apoyado en tu brazo, o sujetarlo por la nuca.
- Coloca el biberón en posición más horizontal (respecto a la boca del bebé)
- Estimula el reflejo de búsqueda, para que el bebé abra la boca bien, y coja la tetina.
- Cuando el bebé comience a succionar, haz pausas cada 15-20 succiones (si nos fijamos bien, los propios bebés realizan estas pausas).
Otros consejos:
- Puedes ir variando el brazo en el que colocas al bebé (derecho o izquierdo) de esta manera, favorecemos un desarrollo visual y la recepción de estímulos de manera simétrica.
- Respecto a la posición que te he comentado, yo te aconsejaría, que se lo dieses colocado en tus brazos, queda el bebé más abrazado, y al fin y al cabo, alimentar, también es un acto de amor.
Marta Espartosa
Enfermera pediátrica
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